El Occidente de Asturias es un tesoro escondido, un rincón donde el ritmo de la vida cambia y la naturaleza te abraza en cada paso. Desde La Pousada de Boimouro, una casona rural con encanto enclavada entre montañas y valles, podrás descubrir una tierra donde el mar y la montaña se dan la mano para ofrecerte un sinfín de experiencias.
Si buscas una experiencia inolvidable en plena naturaleza, el descenso en canoa por el río Eo es una de las actividades estrella que no puedes perderte durante tu estancia en La Pousada de Boimouro. Te animamos a sumergirte en una jornada de aventura suave, ideal tanto para familias como para grupos de amigos o parejas que desean disfrutar de un entorno único.
El río Eo, que marca la frontera natural entre Galicia y Asturias, ofrece un recorrido tranquilo pero emocionante, rodeado de frondosos bosques, aves acuáticas y paisajes de gran belleza. Las aguas del Eo son perfectas para principiantes, ya que su curso es mayoritariamente sereno, lo que permite una navegación segura y relajada.
Además, el descenso en canoa es una forma divertida de conocer el entorno natural del Parque Natural del Río Eo, Oscos y Terras de Burón, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO.
Una actividad al aire libre que conecta deporte, ecoturismo y desconexión total.
A poca distancia de Boimouro, la costa asturiana despliega algunas de las playas más salvajes y bellas del Cantábrico. Tapia de Casariego, Penarronda o Porcía son auténticos paraísos para los amantes del surf.
Escuelas locales ofrecen cursos para todos los niveles, desde quienes quieren cabalgar su primera ola hasta quienes buscan perfeccionar técnica. Las olas aquí tienen carácter, pero también alma.
Los ríos del occidente asturiano, como el Eo o el Navia, son perfectos para descubrir paisajes únicos a golpe de remo. Puedes practicar piragüismo tranquilamente por aguas serenas rodeado de bosques o lanzarte al kayak de mar en las rías, combinando la fuerza del agua con las vistas infinitas del litoral. Una experiencia tan relajante como estimulante.
Un viaje al corazón del saber hacer tradicional. A tan solo unos kilómetros de Boimouro, Taramundi te sumerge en el mundo del agua, el hierro y la madera.
Molinos, ferreiros, telares y museos etnográficos conviven en un entorno de casitas de pizarra y verde sin fin. Es uno de esos lugares donde el tiempo parece haberse detenido para contarte historias al oído.
Si lo tuyo es caminar con propósito, esta ruta te enamorará. Un sendero entre bosques frondosos, pequeñas aldeas y riachuelos que desemboca en una espectacular cascada de más de 30 metros.
La Ruta de A Seimeira es uno de los paseos más icónicos del occidente asturiano, perfecto para conectar con la naturaleza y dejarte llevar por los sonidos del agua y el canto de los pájaros.
Parque de la Vida – Un viaje al corazón de la ciencia y la naturaleza.
A las afueras de Luarca, en la costa occidental asturiana, se encuentra un espacio tan especial como su nombre: el Parque de la Vida. No es un museo, ni un jardín botánico, ni un observatorio astronómico, aunque tiene un poco de todo. Es un lugar único donde la ciencia, la naturaleza y la educación se dan la mano para despertar la curiosidad en grandes y pequeños.
Creado con vocación divulgativa por el investigador y divulgador Luis Laria, este parque es mucho más que una visita: es una experiencia. Aquí puedes tocar un meteorito real, caminar entre modelos de satélites, descubrir especies marinas rescatadas o aprender sobre el cosmos mirando al cielo desde un planetario. Todo en un entorno verde y al aire libre, rodeado de vegetación, senderos y rincones llenos de vida.
Naturaleza, conocimiento y emoción en un solo lugar.
Si disfrutas del turismo de montaña, las cascadas de Penadecabras se encuentran a pocos kilómetros, ofreciendo un espectáculo natural único.
Un poco más arriba está el Monte Penouta (concejo de Boal), con 900 m de altitud, desde donde se contemplan vistas panorámicas de la costa occidental asturiana y oriental gallega.
No olvides visitar la comarca de Los Oscos.
Embárcate en una experiencia única por uno de los tramos más espectaculares de la costa cantábrica. La Senda Costa Naviega revela paisajes de ensueño: acantilados escarpados que parecen desafiar al mar, playas salvajes como Frexulfe (Monumento Natural) y rincones donde la naturaleza aún conserva su esencia más pura.
Itinerario sugerido
Inicio: El Bao o, preferentemente, junto a la playa de Barayo, desde donde contemplar la Reserva Natural Parcial que rodea este enclave Turismo AsturiasEl País.
Ruta: Lineal, de unos 17–19 km según el trazado exacto, con cierta exigencia física por las constantes subidas y bajadas Turismo Asturias+1.
Duración estimada: De 5 a 7 horas andando, dependiendo del ritmo y las paradas que hagas para disfrutar del paisaje Turismo Asturias.
Señalización: Buena y abundante, lo que hace fácil orientarse incluso para familias y senderistas con experiencia limitada Turismo AsturiasWanderlog.
Ideal para bicicletas: Sí, en concreto para bicicletas de montaña; sin embargo, algunos tramos son escarpados y exigen precaución Turismo Asturiaskomoot.
Principales hitos del recorrido
Paraje de Barayo: Reserva natural junto al río del mismo nombre, con dunas, marismas y una rica biodiversidad. La playa ha sido reconocida por su singular belleza El PaísTurismo Asturias.
Puerto de Vega: Encantador pueblo marinero con miradores, historia y gastronomía local; perfecto para una pausa o almuerzo Turismo AsturiasRutas de Asturias.
Frexulfe: Una playa virgen de arena oscura y paisaje prácticamente intacto, ideal para relajarse o, si lo prefieres, refrescarte mientras contemplas el entorno natural Turismo AsturiasEl País.
Navia: El punto final, con un paseo marítimo y todos los servicios necesarios: bares, tiendas y ambiente local Turismo Asturias.
En pleno corazón del concejo de El Franco, muy cerca del pueblo de Andía, y de Boimouro, desde donde se podría ir caminando, se esconde uno de los rincones más sorprendentes del occidente asturiano: las Cuevas de Andía, también conocidas como el Valle Feliz. Un paisaje mágico, donde se funden historia y naturaleza.
Se trata de un paraje natural de gran belleza y valor geológico, declarado Monumento Natural en 2002. Aquí, el tiempo ha moldeado un paisaje kárstico singular, donde la vegetación frondosa se entrelaza con antiguas galerías excavadas por los romanos para la extracción de oro. Hoy, ese pasado minero se ha convertido en un escenario casi mágico, envuelto por el susurro de arroyos, el canto de los pájaros y el aroma del bosque atlántico.
Si quieres alquilar una casa espectacular en el occidente asturiano, tenemos lo que buscas, un lugar espectacular para desconectar en el pequeño pueblo de Boimouro. El silencio, la naturaleza y la calma serán tus únicos vecinos.
